Tierras raras, ¿cuál es su impacto medioambiental?

Tierras raras

Probablemente, muchos de nuestros usuarios no conozcan las tierras raras. Sin embargo, estamos seguro de que cada vez se irán conociendo más y más. De hecho, probablemente es posible que estén leyendo este artículo gracias a ellas. ¿Quieren conocerlas?

¿Qué son las tierras raras?

Las tierras raras son un conjunto de elementos químicos pertenecientes al grupo de los lantánidos. Este nombre proviene del Lantano, ya que es el primer elemento químico de este grupo. Está formado por 15 elementos de este tipo (lantano, cerio, praseodimio, neodimio, prometio, samario, europio, gadolinio, terbio, disprosio, holmio, erbio, tulio, iterbio y lutecio) y también escandio e itrio.

¿Para qué se usan?

Las tierras raras tienen multitud de usos los más comunes son las energías renovables como la solar y eólica, smartphones, ordenadores, medicamentos…

A pesar de su nombre y sus múltiples aplicaciones, la cantidad de estos elementos no es tan escasa como podemos llegar a pensar. Estos se encuentran en la corteza terrestre y para hacernos una idea de la cantidad de estos elementos, podemos compararlos con la cantidad de plata existente en la Tierra. Podemos decir que de la cantidad de plata existente en nuestro planeta es de un 0,00002% mientras que hay un 0,02% de tierras raras.

El motivo por el cual se denominan tierras raras es debido a que se pueden disolver en un medio ácido.

¿Cómo se agrupan?

Los lantánidos están divididos en dos grandes grupos. Están los ligeros, cuya abundancia es mayor, y los pesados, que se encuentran más difícilmente (excepto el ytrio).

Las tierras raras se encontraron en el siglo XVII, pero su aplicación en distintos ámbitos no comenzó hasta después de la Segunda Guerra Mundial. La importancia de estas tierras raras viene dada de su uso como hemos dicho anteriormente (petroleras, energías renovables…). Para comprender mejor su importancia, podemos decir que el lantano es fundamental para elementos como cámaras digitales, el cerio para hacer baterías, el neodimio holmio y disprosio para cristales láser, el iterbio y terbio se usan para dispositivos de almacenaje… Como podemos ver, se utilizan para cualquier elemento de lo más común y con los que los usuarios normales utilizan en su día a día.

¿Cuál es el impacto medioambiental de las tierras raras?

La extracción de las tierras raras es uno de los temas que más polémica genera. Se extraen de minas abiertas, sin embargo, son necesarios productos químicos muy agresivos. No solo eso, es muy común que estos elementos se encuentren en lugares que también existan minerales radioactivos como el torio o el uranio.

Ahora hay que sumar los recursos necesarios para obtener una tonelada de estos elementos. Pueden dar lugar a casi 12.000 m³ de gas que contenga polvo, dióxido de azufre, ácido sulfúrico y ácido fluorhídrico. Se utilizan grandes cantidades de agua para su procesamiento, por lo que quedan unos 75.000 litros de agua residual, por lo que nos dejan con casi una tonelada de residuos radioactivos solo para la extracción de los mismos.

En otras palabras, todo lo cercano a los lugares de tratamiento de estos productos, quedan contaminados por radiación, desde la vegetación hasta el suelo y agua. Y no solo eso, esto podría afectar a la industria agroalimentaria cercana.

Evidentemente, todo esto se realiza debido a los intereses económicos, ya que dependiendo de la rareza de estos elementos se pueden llegar a pagar entre 50.000 USD y 1.000.000 USD por tonelada.

¿Cómo podemos reducir el impacto medioambiental?

No podemos caer en la corriente de pensamiento basada en que una sola persona no puede hacer nada. Sino que debemos basarnos en la famosa frase de “Actúa local, piensa global”, ya que con pequeñas medidas podremos reducir mucho la contaminación generada.

• En primer lugar, debemos reciclar, por ejemplo, a la hora de deshacernos de productos electrónicos, podemos llevarlos a puntos limpios de reciclaje.
• Hay que utilizar estos elementos solo cuando sean indispensables, ya que, si podemos utilizar algún elemento en lugar de tierras raras, reduciremos su uso.
• Dejar el consumismo a un lado, debemos comprar elementos de calidad para que de este modo tengan una mayor duración y no tengamos que cambiarlos frecuentemente. También, debemos aprovecharlos al máximo y no sustituirlos por placer o porque algún componente que se puede sustituir fácilmente falla.
• Buscar sustitutos: es posible, que esta opción sea la más compleja, ya no depende directamente de nosotros puesto que si por ejemplo tenemos que comprar un coche y que queremos que sea eléctrico, es posible que contenga tierras raras. No obstante, si nos documentamos podremos descubrir que existen alternativas.

Curso Transición ISO 14001:2015

Como hemos visto durante el artículo, estas tierras raras provocan un gran impacto medioambiental. Es cierto que en muchas ocasiones no se puede evitar producirlas, no obstante, muchas empresas no trabajan en la reducción de este tipo de elementos bien sea por desconocimiento o porque no les importa el medioambiente. Para todos aquellos que estén concienciados en el cuidado de nuestro planeta, aquí les dejo el Curso de Transición ISO 14001:2015 que ayudará a tener los conocimientos necesarios para que su organización sea más eficiente.