Principios de gestión ambiental: La comprensión de las necesidades y expectativas de las partes interesadas

Principios de gestión ambiental

Al inicio de los requisitos sobre principios de gestión ambiental basados en ISO 14001 para implementar un Sistema de Gestión Ambiental (SGA) hay un paso crítico que tiene lugar después de identificar el contexto de la organización, pero antes de determinar el alcance del SGA. Este paso es la comprensión de las necesidades y expectativas de las partes interesadas para el SGA. Aunque puede parecer sencillo y no necesariamente importante, la información que se reúne y las decisiones que se tomen durante esta fase de la aplicación puede influir mucho en la dirección del SGA.

Hay tres partes en la cláusula 4.2 en la comprensión de las necesidades y expectativas de las partes interesadas para los principios de gestión ambiental del SGA. Estos son requisitos para la organización con el objetivo de determinar:

• Quiénes son las partes interesadas
• Cuáles son las necesidades pertinentes de las partes interesadas
• Qué necesidades se convierten en obligaciones

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¿Quiénes son las partes interesadas?

Es importante recordar que este paso viene justo después de haber determinado las cuestiones que son relevantes para el SGA de la empresa, tanto interna como externa, lo que afectará a cómo alcanzar los resultados ambientales. Dicho esto, se debe pensar en las partes interesadas que son relevantes para el Sistema de Gestión Ambiental. La lista de las partes interesadas pertinentes será única para el negocio. Una manera de generar una lista es pensar a través de todos los procesos que se llevan a cabo y que pueden estar interesados ​​en cómo interactúan con el medio ambiente.

En la mayoría de las jurisdicciones existen leyes y reglamentos ambientales que se pueden aplicar a las operaciones de la organización. Por ello, las agencias gubernamentales que se encuentran detrás de esas leyes serán una parte interesada. Pero otras partes interesadas pueden no ser tan fáciles de determinar. Algunos ejemplos pueden incluir:

• Personas que viven cerca de la organización si existiese la posibilidad de un impacto ambiental local.
• Accionistas que desean evitar multas y sanciones.
• Clientes y consumidores que quieren tratar con las empresas y el medio ambiente.
• Incluso trabajadores que desean la satisfacción de saber que su trabajo tiene una baja huella de carbono.

¿Cuáles son las necesidades pertinentes de las partes interesadas?

Ahora que se ha identificado quién está interesado, se debe hacer una lista de las necesidades y expectativas. En la norma sobre los principios de gestión ambiental, el término “necesidades y expectativas” es seguido por el término “requisitos”. Se debe examinar a cada persona o entidad que se ha identificado como interesado en el SGA e identificar lo que ellos esperan de la organización.

Las agencias del gobierno esperan que se continúe con la aplicación de las leyes y el informe a tiempo si es necesario. Los vecinos de los alrededores esperarán que la organización cuente con controles para prevenir daños al medio ambiente cerca de sus casas. Además de que se cuente con un plan de emergencia por si algo sucediese. Los accionistas y los trabajadores pueden esperar que se encuentren mejoras en los procesos del SGA y por lo tanto se estén reduciendo los impactos ambientales.

¿Cuál de estas necesidades deben convertirse en obligaciones de cumplimiento?

Por supuesto, no todas las expectativas de partes interesadas tienen que convertirse en algo por lo que preocuparse. Así, después de determinar qué esperan las partes interesadas es necesario establecer cuál de estas expectativas se convierten en obligaciones dentro del SGA. Una vez más, es bueno pasar por cada una de las expectativas que se han identificado y determinar si esto se convertirá en algo que se va a planificar para hacer frente dentro del sistema de gestión.

Si bien es fácil pensar que se incluirán todos los requisitos legales, puede haber algunas expectativas que están fuera del alcance de la organización. Es importante recordar la diferencia de los requisitos legales o contractuales del cliente. Pues no todas las expectativas están necesariamente dentro del ámbito a tratar por la organización. Se debe tener cierta capacidad para decir no a las necesidades declaradas que no se aplican a la propia organización o que no son razonables.

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