
3 bulos sobre el SDDR
El Sistema de Depósito, Devolución y Retorno (SDDR) es una medida diseñada para fomentar el reciclaje y la reutilización de envases de bebidas. Sin embargo, ha sido objeto de desinformación y falsos mitos que generan confusión entre los consumidores y comerciantes.
Desmontando los bulos sobre el Sistema de Depósito, Devolución y Retorno (SDDR)
1. «Los pequeños y medianos comercios tendrán que pagar las máquinas de recogida de envases»
Uno de los argumentos más repetidos en contra del SDDR es que los comercios minoristas tendrán que asumir el coste de las máquinas encargadas de recoger los envases y expedir los tickets de descuento para los consumidores. Esto es falso. La legislación establece que la recogida de envases es un coste que deben asumir los envasadores y distribuidores, no los comercios. Si en algún caso se opta por la instalación de máquinas, también será financiada por estos actores, no por los pequeños y medianos comerciantes. Además, el SDDR no obliga a la instalación de estas máquinas: el pequeño comercio podrá gestionar la devolución de manera sencilla, sin necesidad de emitir tickets, simplemente intercambiando los envases vacíos por nuevos llenos.
2. «El SDDR supondrá un sobrecoste para el consumidor y encarecerá la cesta de la compra»
Otro de los bulos más extendidos es que el SDDR implicará un aumento del precio de los productos de consumo. No obstante, la normativa es clara al respecto: los productores serán quienes asuman el primer pago del depósito, fijado en una cuantía igual o superior a 10 céntimos por unidad de envase de bebida introducida en el mercado. Además, los productores también deberán financiar el sistema para garantizar su correcto funcionamiento, la gestión de residuos y el cumplimiento de los objetivos de reciclaje establecidos por el Real Decreto 1055/2022, de 27 de diciembre. Por lo tanto, el consumidor no experimentará un sobrecoste real, ya que recuperará el importe del depósito al devolver los envases.
3. «Tendremos que destinar más espacio en casa y perderemos mucho tiempo gestionando los envases»
Algunas voces críticas con el SDDR han afirmado que este sistema obligará a los hogares a destinar hasta un 50% más de espacio para almacenar los envases y a invertir hasta seis veces más tiempo en su gestión. Esto es rotundamente falso. Un envase vacío ocupa exactamente el mismo espacio si se almacena para devolverlo en el establecimiento donde se compró o si se deposita en el contenedor amarillo. Además, el sistema SDDR puede incluso ahorrar tiempo a los consumidores, ya que al devolver los envases en el mismo lugar donde compraron las bebidas, se evitan desplazamientos innecesarios en busca de un contenedor amarillo.
Beneficios del SDDR
El SDDR contribuye a la sostenibilidad ambiental, y ofrece una serie de ventajas económicas y sociales que lo convierten en un sistema altamente beneficioso para todos los actores involucrados. Algunas de las ventajas del SDDR son:
- Mayor tasa de reciclaje: en países donde se ha implementado, como Alemania o Noruega, las tasas de retorno superan el 90%, lo que reduce drásticamente la cantidad de residuos plásticos en el medio ambiente.
- Reducción de la contaminación ambiental: al evitar que envases de plástico, vidrio y aluminio terminen en vertederos, ríos o mares.
- Impulso a la economía circular: el SDDR promueve un modelo de economía circular en el que los materiales se reutilizan y reciclan en lugar de convertirse en desechos.
- Beneficio económico para el consumidor: los consumidores recuperan el depósito pagado al devolver los envases, lo que incentiva hábitos responsables sin representar un gasto adicional.
- Reducción de emisiones de CO2: al disminuir la producción de nuevos envases y optimizar la logística del reciclaje, se reduce significativamente la huella de carbono del sector de envases y embalajes, contribuyendo a la lucha contra el cambio climático.
- Mayor concienciación ambiental: la implantación del SDDR refuerza la educación y concienciación de la población sobre la importancia del reciclaje y la correcta gestión de los residuos, fomentando una cultura de sostenibilidad a largo plazo.
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Adoptar un SDDR requiere un enfoque estratégico y una gestión eficiente de los procesos relacionados con el medio ambiente. En este sentido, el Software de Medio Ambiente de ISOTools, se posiciona como una plataforma tecnológica que permite a las organizaciones gestionar de manera integral y automatizada todos los aspectos vinculados a su desempeño ambiental.
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