Uno de los principios fundamentales para que una organización implante un Sistema de Gestión Ambiental, es la mejora continua, una de las bases de la norma ISO 14001. Este es uno de los puntos más confusos, puesto que, es difícil averiguar cuál es la mejor forma de trabajar para obtener los beneficios de una mejora continua.
En la actualidad, uno de los temas que más están preocupando a la población, y, por consiguiente, a las empresas, es el cuidado del medioambiente, por lo que se han venido implementado varias iniciativas legislativas y económicas de protección medioambiental que intentan controlar el impacto procedente de estas industrias y crear mecanismos de prevención.
La norma ISO 14001 presenta una oportunidad para que las empresas demuestren el cumplimiento de acuerdo con las buenas prácticas globales en gestión ambiental. Una encuesta realizada por IEMA (Instituto de Gestión y Evaluación Ambiental) demuestra que más del 40% de los encuestados dijo que la norma ISO 14001 trae una gran aceptación por parte de la alta dirección. Si esto se logra, las empresas deben buscar mayores beneficios a partir de un mayor compromiso y responsabilidad con el personal en todos los niveles. La encuesta reveló que el 40% de los encuestados piensan que ahorrarán alrededor de 15,000$ al año gracias al uso de la norma ISO 14001, ya que ofrece medidas de eficiencia energética y mejora la gestión de residuos.
ISO 50001 es una regulación internacional desarrollada por ISO (Organización Internacional de Normalización) que tiene como objetivo mantener y mejorar un sistema de gestión de energía en una organización, cuyo propósito es permitir la mejora continua en eficiencia energética, seguridad energética, Uso y consumo de energía con un enfoque sistemático. Este estándar tiene como objetivo permitir a las organizaciones mejorar continuamente la eficiencia, los costos relacionados con la energía y las emisiones de gases de efecto invernadero.
Cada vez son las empresas más respetuosas con el medio ambiente, el efecto invernadero y el calentamiento global se ha convertido en problemas de impacto mundial. Las oficinas suponen un 40% del consumo energético a nivel mundial, se trata de la mitad de la energía consumida en el sector servicios.
El cambio climático es una realidad que afecta a todos los seres vivos del planeta, produciendo un efecto negativo en nuestras vidas.
El riesgo ambiental se define como la posibilidad de que ocurra un suceso en el medio ambiente ya sea de forma natural o de origen antropológico y las consecuencias negativas del mismo en el entorno natural, humano y socioeconómico. Para reducirlos o mitigarlos se tienen que llevar a cabo medidas predictivas, preventivas o correctivas.
Las empresas pueden ser una fuerza importante para lograr un cambio positivo en el mundo. Todos y cada uno de nosotros podemos hacer contribuciones importantes para enfrentar los desafíos de nuestro mundo cambiante. Hoy, millones de personas en todo el mundo viven en extrema pobreza y carecen de acceso a necesidades básicas como alimentos, atención médica, agua potable o electricidad.
El cambio climático es una realidad que afecta a todos los seres vivos del planeta, produciendo un efecto negativo en nuestras vidas.
Las empresas determinan e identifican sus aspectos ambientales y sus impactos ambientales asociados, y evalúa la significancia o no de éstos en la empresa. El procedimiento para realizar dicha evaluación, suele proceder de un documento en el cual se especifica los criterios a llevar a cabo para la evaluación de esos aspectos.
